28 June 2007

Reacciones a los editoriales de elPeriódico

Comentarios al Editorial del 20 de junio

Oscar Gustavo Ancheita Escobar:
Ante la falta de aplicación de la justicia, estos hechos se seguirán dando. La población está cansada de la ola de violencia que azota a Guatemala. Además la falta de acción de la Policía y, lo que es peor, el Organismo Judicial está exageradamente burocratizado y eso hace que nunca haya castigo para los delincuentes, quienes más tardan en entrar que en salir de las cárceles. Si se quiere evitar los linchamientos, las autoridades correspondientes deben cumplir con sus funciones, caso contrario la población tomará la justicia en sus manos. ¡Triste!, pero esa es la realidad.

José León:
Lamentablemente la falta de justicia en Guatemala está llevando a la población a tomar la justicia por sus propias manos. De seguir así no dudemos que veremos linchamientos en todo el país. La inutilidad de la Policía Nacional Civil una vez más a la vista. Espero que después no se arrepientan de no ejecutar la justicia como es. Pena de muerte (y no se cumple), libertad al delincuente (supuestamente por falta de pruebas): hasta que no se respete la ley no saldremos adelante.

Luis Aguilar:
Señor de redacción, pero ¿qué espera que nuestro pueblo haga? Si las autoridades están a los pies de los delincuentes, es más, ellos mismos son los delincuentes, claro que la gente se cansa y está harta de estar soportando la escalada de violencia, y la impunidad en la que los mendigos mareros se sienten a sus anchas, especialmente en contra de la niñez. Dígame usted ¿qué haría usted si fuera su hijo/hija al que hubieran secuestrado? Yo lo siento mucho, pero aunque me metan al bote de por vida si alguien le hace algo a mi familia, no me queda otra que sacar las uñas y como dice usted "ojo por ojo y diente por diente" ¿salvajismo? Sí, pero de esperar a que las autoridades hagan algo, eso no creo que esté dentro de las prioridades ni de éste gobierno ni de los que vendrán en el futuro.

Samuel Pérez:
Lo del ojo por ojo ya se dio con el señor Trejo, y creo que al paso que vamos, regresamos a la ley de la selva, ¡que gane el más fuerte y el que tenga más armas! El problema es la anarquía que vivimos en Guatemala. Tráfico de niños, de blancas, de drogas, de especies en peligro de extinción... todo ello es un mercado anárquico, poco ético y que es efecto de una sociedad pobre material, intelectual y moralmente. La gente hace lo que no se le impide para salir de pobres, y no les importa si es violando leyes o premisas morales. Sí es posible vivir mejor en Guatemala, lo que pasa es que si no pensamos en el largo plazo, y en la prevención, lo que haremos es sobrevivir entre muchos y que gane el más fuerte. Lo que sembramos cosechamos.

Francisco Suchité:
Lo que sucede es que esa área del Oriente esta manejada por alborotadores que usan pasquines para mantener a los pobladores del pueblo 'controlados' por miedo... la reacción animal de querer linchar un campesino indígena que apenas habla español... es puro racismo, como siempre ha sido en esos pueblos del Oriente. El abandono en el que las agendas políticas de los gobiernos han tenido al área rural chortí es manifiesto ahora (casualidad que andaba un candidato por el área). ¡Qué de al pelo, ahora no sólo el hambres matara al chortí sino los efervescentes pueblerinos querrán ahogar su frustración con el sistema legal, en el más débil!

Oscar Tárano:
Tienen razón, es un acto de salvajismo extremo. A la vez hay que aclarar que la actitud de la población es producto directo del fallido estado conducido por Oscar Berger, secundado por las autoridades de Gobernación, Tribunales y MP (bueno para amargar a los que se defienden, pobre Florido porque ¿quién puede después de esto contratar sus servicios como abogado?). El gobierno y demás entidades que viven de los impuestos son realmente los culpables, las actitudes de las personas son los efectos, no los causales. Igual debe de hacerse conciencia de que no pueden linchar, pero en una guerra todo es válido y estamos en guerra, la delincuencia nos tiene sitiados, acosados, de rodillas y de vez en cuando nos defendemos, talvez no de la "mejor forma", pero qué otra, si la vida está en juego.

Comentario al Editorial del 25 de junio

Hans Anderson:
Actos espeluznantes esos de linchar personas, torturándolas y quemándolas. Me da tristeza y rabia conocer de estos acontecimientos. Y me da vergüenza que sucedan en mi país, aun cuando todos los días hay notas vergonzosas de Guatemala. A estos salvajes sin conciencia les debería de caer todo el peso de la ley. También se debería de realizar cruzadas para hacerles ver a estos animales que ellos se convierten en peores criminales que estas víctimas de linchamiento. Además el acto de linchamiento es uno de inmensa cobardía y crueldad. Eso es Guatemala; un país de autoridades corruptas, gente sin educación, inmensamente cruel, un país de hermosas tierras y bellezas naturales pero que por su gente es mejor no vivir allí.

27 June 2007

Reaparición de los linchamientos

elEditorial de elPeriódico (25 jun 07)

Como siempre, los “linchadores” torturan cruelmente a los presuntos delincuentes y pretenden dar una muerte lenta, infamante y dolorosa, haciendo gala de sadismo y profundo desprecio por el ser humano.

En todo caso, el linchamiento trata de constituir una justicia popular directa, ejecutiva y ejecutora al máximo. Tiene sus orígenes en Estados Unidos, en las postrimerías del siglo XVIII, con dos causas principales: el odio contra los negros, principales víctimas de las ejecuciones irregulares, y la soledad de las colonias que iban estableciéndose conforme el hombre blanco extendía su influjo hacia el Lejano Oeste.

El Código Penal sanciona los linchamientos bajo la denominación de “delito de muchedumbre”, el que tiene las siguientes notas tipificantes: Si la reunión tuvo por objeto cometer determinados delitos, responderán como autores todos los que hayan participado materialmente en su ejecución, así como los que, sin haber tenido participación material, asumieron el carácter de directores.

Asimismo, el Código Penal dispone que comete el delito de asesinato quien matare a una persona con alevosía, premeditación o perversidad brutal, y que el responsable será sancionado con prisión de 25 a 50 años o con pena de muerte cuando el imputado acusare peligrosidad social.

No obstante, la gran mayoría de linchamientos en Guatemala permanecen impunes, y esto ha provocado que los mismos se sucedan uno tras otro, con toda su cauda de violencia, terror y psicosis, que impacta no solo entre la población guatemalteca, sino también entre los turistas e inversionistas extranjeros que apuntalan la economía nacional.

Los informes sobre los casos de linchamientos reflejan que los mismos no necesariamente son consecuencia de la falta de acceso a la justicia, o de que la justicia no haya sido pronta y cumplida, sino que obedecen a otras causas: Instigación por parte de ex patrulleros de auto defensa civil, hostigamiento religioso, impulsos sadomasoquistas a nivel de poblaciones desgarradas por la opresión y la violencia, bajos niveles de desarrollo, etcétera.

Aunque algunos lo justifican con vehemencia, el linchamiento es otra manifestación de la escalada de violencia que estamos viviendo y otro síntoma de descomposición de la sociedad guatemalteca.

26 June 2007

Se incrementa práctica de linchamientos en Guatemala

Guatemala, (EFE).- La práctica de los linchamientos se ha incrementado en Guatemala, principalmente en el norteño departamento de Alta Verapaz, en donde se han registrado tres casos en la última semana, con un saldo de tres fallecidos y dos vapuleadas.

El último hecho ocurrió la noche del domingo, en la comunidad de San Pedro Carchá, en donde dos mujeres se salvaron de morir linchadas por una turba de lugareños que las acusaba de haber robado a tres niños de la comunidad.

Según el reporte de la Policía Nacional Civil (PNC), las mujeres fueron rescatadas de la enardecida turba que las vapuleó y pretendía quemar vivas.

Los hechos se iniciaron cuando vecinos de la aldea Campur, descubrieron que en la casa de estas mujeres se encontraban tres niños recién nacidos que habían sido robados días atrás.

La ausencia de las fuerzas de seguridad en las comunidades apartadas del país, así como la desconfianza de la población en el sistema de justicia de Guatemala son, según expertos, las principales causas de los linchamientos en este país centroamericano, los cuales se han incrementado en los últimos días.

La semana pasada, en dos comunidades indígenas del departamento de Alta Verapaz, tres hombres acusados de asesinato y robo fueron vapuleados y quemados vivos por los pobladores.

Mientras que el pasado sábado, en la comunidad indígena de Patzicia, en el departamento de Chimaltenango, a unos 70 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, dos jóvenes estuvieron a punto de ser linchados y quemados.

Uno de ellos falleció en un hospital público cuando era intervenido por los médicos.

20 June 2007

Otra vez los linchamientos

elEditorial de elPeriódico (20 jun 07)


Es comprensible el grado de desesperación al que han llegado los vecinos de Camotán y Jocotán, Chiquimula, ante el condenable secuestro de niños que está ocurriendo en aquella región, cometido por bandas de desalmados delincuentes. Su indignación es muy grande ante el plagio y el asesinato de la pequeña Alba Michell España Díaz, de solo nueve años, ocurrido la semana anterior, ante el estupor de la población.

Alba Michell era muy apreciada por los vecinos; incluso había ganado el concurso Miss Chiquitita. Pues ante la falta de seguridad que se enseñorea por todo el país, y en señal de protesta colectiva, los enardecidos pobladores quemaron una autopatrulla y una motocicleta de la Policía Nacional Civil, buscaron y localizaron a tres mujeres a las que acusan del crimen y procedieron a linchar a una de ellas. La otra está detenida y la tercera no aparece.

La dolorosa frustración que sufre nuestro pueblo ante el surgimiento de agresiones incalificables de la criminalidad contra vecinos pacíficos y honrados, ha hecho reaparecer nuevamente la práctica del inaceptable linchamiento, el primitivismo de matarnos a golpes, pedradas y garrotazos, como ocurría en las tribus de la antigüedad.

Tal como sucedió en años recientes, grupos de pobladores del área rural están desesperados y frustrados ante el incremento de la delincuencia y la ineficacia de la aplicación de la Ley, por lo que han optado por “hacerse justicia por mano propia”. El auge del linchamiento en numerosos departamentos del interior del país ha corrido paralelo a la crisis del sistema de justicia.

No obstante, nuestros compatriotas deben tomar conciencia de que se trata de un procedimiento ilegal, inaceptable, que debe ser erradicado sin dilación. El linchamiento es uno de los más crueles crímenes en la historia de la humanidad. Además, quienes linchan a un supuesto delincuente se convierten en criminales, porque los tribunales de justicia son los únicos que pueden juzgar, condenar y castigar a un acusado de haber cometido un delito.

Es comprensible el dolor de nuestros compatriotas ante el ataque salvaje de la criminalidad. Sin embargo, es equivocado guiarnos por la ley de la selva en busca de justicia. Lo peor de todo es que una muchedumbre descontrolada corre el riesgo de sacrificar a un inocente. Ya es hora de que las fuerzas gubernamentales de seguridad cumplan su obligación constitucional, inexcusable, de perseguir el crimen y garantizar una convivencia pacífica y civilizada entre los guatemaltecos. ¿O queremos que la población se cobre ojo por ojo?

Linchan a dos hombres

Por E. Sam y A.Tax.
Prensa Libre (20 jun 07)

Carlos Yat Maquín, de 26 años, y Manuel Caal Caal, 30, fueron linchados ayer por una turba de más de dos mil pobladores de las aldeas Canlech y Yalpelmech, de Chisec, Alta Verapaz.

Las víctimas fueron acusados de haber secuestrado y dado muerte al transportista Ignacio Chen, 43, quien conducía un camión en compañía de Francisco Javier Jucub, 20, a quien hirieron con arma de fuego.

Ayer por la mañana, apareció el cuerpo de Chen, lo que provocó la ira de los pobladores, que se dieron a la tarea de buscar a los presuntos asesinos.

Encontraron a Yat y a Caal Caal, a quienes vapulearon hasta darles muerte.

Policías intentaron imponer el orden, pero fueron agredidos por la turba.

Linchan a dos en Chisec

Siglo XXI (20 jun 07)

Manuel Caal Caal, de 30 años, y Carlos Yat Maquín, de 26, fueron linchados en el cruce Nueva Palestina, Chisec, Alta Verapaz.

Ambos fueron señalados de asaltar, la noche del lunes, a Ignacio Chen y Francisco Javier Jurux, quienes viajaban en un camión cargado de maíz.

Chen fue asesinado a balazos y Jurux resultó herido. Con el testimonio de Jurux, quien identificó a los aludidos, los vecinos comenzaron una persecusión que terminó con una golpiza y posterior quema de ambos.

19 June 2007

Tensión en Chiquimula por secuestro de niños

Por Leonardo Cereser, Edwin Paxtor y Coralia Orantes
Prensa Libre (19 jun 07)

La indignación por el asesinato de Alba Mishell España Díaz, de 9 años, aún no termina, y en Camotán y Jocotán, Chiquimula, persiste la tensión, porque se cree que ese crimen sacó a luz el problema del secuestro y tráfico de niños.

Ayer por la tarde, la población de Camotán se dividía entre los rezos en la casa de la niña asesinada y las discusiones con las que -en el salón municipal- se determinó un plan de seguridad para hacer frente a los presuntos secuestros de menores.

Mishell desapareció el jueves último, y su cuerpo fue localizado un día después, en el camino de terracería que de Camotán conduce a la aldea Muyurco.

En vista de esto, los pobladores reaccionaron con la captura de tres mujeres sindicadas del crimen: una fue linchada, otra fue vapuleada, y la otra no aparece.

El domingo recién pasado, en Jocotán, también se vivió un hecho similar, cuando Dunia Marleny Guerra Aldana, de 37, y María López Marcos, 40, fueron detenidos por los pobladores, sindicadas de haber secuestrado a una niña.

Vecinos quemaron, incluso, un autopatrulla y una motocicleta de las fuerzas de seguridad, en protesta porque éstas no permitieron que agredieran a las señaladas.

Las dos mujeres fueron enviadas a prisión ayer, y quedaron ligadas a proceso por el delito de secuestro de menores.


Vecinos tienen el control


Desde ayer, los pobladores de Jocotán y Camotán decidieron velar por la seguridad de esos municipios, para evitar que se sigan produciendo hechos delictivos.


Álvaro Mauricio Guerra, alcalde de Camotán, se reunió con unos 500 vecinos.

“Tenemos que organizarnos y tener nuestra propia seguridad, llevar registro de los extraños que vienen a vivir al pueblo y protegernos entre nosotros”, dijo Guerra.

Los agentes de la Policía Nacional Civil decidieron abandonar esos poblados, para evitar un enfrentamiento, ya que los amenazaban con atacarlos y que destruirían las subestaciones.

“Tenemos órdenes de trasladar todo a la Comisaría en Chiquimula”, dijo el policía Luis Bernardo Pinto, cuando recogía algunas de pertenencia de la Subestación de Jocotán.

La ira de los pobladores se debe a que tienen tres años de estar sufriendo con el secuestro y tráfico de niños. Sin embargo, las autoridades señalan que no hay denuncias al respecto.

Vecinos comentaron que los delincuentes logran convencer a mujeres que viven en extrema pobreza para entregar a los menores, y pagan Q3 mil por niño y Q2 mil por niña.

A pesar de los señalamientos, en el Ministerio Público (MP) no se conocen denuncias por estos hechos, pese a lo cual se iniciaron las pesquisas para determinar quiénes son los responsables.

Sectores de la sociedad consideran que hay grupos que se aprovechan de la pobreza de los pobladores, para comerciar con los menores -que después son dados en adopción-.

Pesquisas

Ayer se empezaron a recibir las declaraciones de los afectados, las cuales servirán para trazar las líneas de investigación.

“Estamos a la espera del informe forense”, dijo el fiscal Rudy Rocael Pineda.

Según información del médico forense -quien se identificó sólo con los apellidos López Araujo-, se presume que la niña España Díaz ya tenía unas 18 horas de haber fallecido cuando se encontró su cadáver.

En el informe forense se detalla que el cuerpo presenta varias lesiones, que no se hicieron en forma quirúrgica, y que, incluso, podrían haber sido causadas por animales.

Fiscales del MP informaron que se han tenido reportes de secuestros de menores entre familiares, pero esos hechos se solucionan rápido.

Habitantes de ambas comunidades recibieron un anónimo, donde se señala a ocho personas de ser parte de una red dedicada al comercio de niños.

En la Procuraduría de los Derechos Humanos se conocen cinco denuncias de secuestros de niños, en diferentes poblados de Chiquimula, las que serán analizadas para ver si tienen relación entre sí.

“El hallazgo sirvió para destapar un problema que todos conocíamos, pero nadie quería denunciar”, dijo Guerra.

En todas las casas de Camotán se observaba un crespón negro como símbolo de luto por Mishell, quien fue la primera Miss Chiquitita del pueblo.

“Era una niña a quien todos querían. Llamaba mucho la atención de la gente”, dijo María Díaz, tía de menor, cuando mostraba su cuarto ordenado, como quedó desde el jueves, cuando desapareció.

La tía todavía recuerda la última travesura, cuando, con pintura, manchó con sus manos las paredes de la casa que ahora son un recuerdo triste.

Los vecinos de estas poblaciones no hablan de lo sucedido; tienen temor por lo que puede pasarles a ellos o sus hijos, aunque reconocen estar alerta y que, cuando se enfrenten al secuestro de otro menor, reaccionarán igual, porque no creen en la justicia ni las autoridades, afirman.

MP: Testimonios

El Ministerio Público (MP) empezó a recibir las primeras declaraciones de los familiares y vecinos de la menor Alba Mishell España, asesinada la semana recién pasada en Camotán, Chiquimula.

“Aún no podemos dar detalles de quiénes podrían estar detrás de esto, pues debemos trazar una ruta de investigación”, expresó Rudy Rocael Pineda, fiscal de Chiquimula.

También esperan el informe del forense.

PDH: Denuncias

La Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) ha recibido denuncias y, por ello, analiza cinco casos en donde se han reportado desapariciones de niños, para determinar si tienen relación entre sí.

Las denuncias que recibió la PDH señalan que existe un grupo de personas que se ha dedicado a comprar menores: las niñas se pagan a Q2 mil, y los niños, a Q3 mil. La PDH ve a la población temerosa de que surjan más problemas.

PNC: Se retiran

Los agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) de Jocotán y Camotán abandonaron las subestaciones, debido a amenazas de los vecinos.

Luis Bernardo Pinto, jefe de la Subestación de Jocotán, dijo: “La muerte de Mishell provocó indignación; por ello, la población arremetió contra quienes, se sospecha, roban y trafican niños”.

Ayer, los agentes sacaron sus pertenencias del lugar, para evitar cualquier posible ataque.

18 June 2007

Sobre los recientes casos en Chiquimula

Por Carlos A. Mendoza (18 jun 07)

Lamentablemente, siguen ocurriendo casos de linchamiento en diversas zonas del país. Ahora sobresale en los medios escritos (leer abajo) el linchamiento en Camotán, Chiquimula.

Chiquimula es un departamento del Oriente de Guatemala. Es más conocido por ocupar el sexto puesto en el ranking de departamentos con mayores tasas de violencia homicida (ver artículo), que por ser un departamento con alguna incidencia en linchamientos. De hecho, en el período 1996-2002, Chiquimula únicamente registró 2 casos fatales y 4 formaciones de turbas. Lo que refuerza la idea de que donde abundan los homicidios hay pocos linchamientos, y donde hay muchos linchamientos hay pocos homicidios.

De esos 6 casos de linchamiento registrados por la MINUGUA en Chiquimula, 2 ocurrieron en el municipio de Jocotán. Ninguno en Camotán.

Esos dos municipios son particulares, porque en ellos ocurrió la hambruna del año 2002 a consecuencia de la caída de los precios del café en el mercado internacional durante el año previo y de la sequía que afectó la región. Según el Censo Nutricional de 2002 (citado por PNUD, p. 67) la desnutrición aguda estaba entre el 20 y el 19 por ciento, la desnutrición severa era del 10 por ciento, y la moderada iba de un 10 a un 9 por ciento. Por lo tanto, un 40 por ciento de la niñez estaba siendo víctima de algún grado de desnutrición.

Esa desgracia socioeconómica fue co-relacionada con una realidad sociológica: uno de esos municipios tiene un gran porcentaje de población indígena. Es el caso de Jocotán, con 81 por ciento, según el censo de población del año 2002. Camotán tiene un 17 por ciento, el cual es relativamente alto para esa región del país.

Como es sabido, yo he encontrado evidencia empírica para correlacionar la variable étnica con la probabilidad de que ocurra un linchamiento, pues los fuertes vínculos comunitarios, fundamentados en la identidad y el sentido de pertenencia, facilitan la acción colectiva para proveer bienes públicos que el Estado no provee, como seguridad y justicia (ver Mendoza 2007). Así que no me sorprende que emerjan brotes de violencia colectiva precisamente en esos municipios.

Referencias:

PNUD (2002). Informe Nacional de Desarrollo Humano. Guatemala: Desarrollo Humano, Mujeres y Salud.

Mendoza, C. (2007). Ausencia del Estado y Violencia Colectiva en Tierras Mayas. Una aproximación cuantitativa al fenómeno de los linchamientos en Guatemala (1996-2002). Guatemala: SEGEPLAN-FLACSO.

Pobladores intentan linchar ayer a una mujer en Jocotán

Por Ricardo Quinto
elPeriódico (18 jun 07)

Los vecinos de Jocotán se enfrentaron ayer con la Policía Nacional Civil (PNC), que rescató a una mujer que intentaban linchar.

Según Julio Hernández, director de la PNC, los hechos se produjeron a las 15:30 horas, cuando vecinos del barrio San Lorenzo, Jocotán, Chiquimula, intentaban linchar a una mujer que circulaba por la zona en compañía de una menor que supuestamente intentaba secuestrar.

Carlos Caljú, vocero de la PNC, agregó que después de rescatar a la mujer se comprobó que la menor era su familiar y que ambas sólo podían comunicarse en idioma chortí.

El intento de linchamiento se produjo dos días después de la desaparición y posterior asesinato de Michelle España Díaz, de 9 años, en la aldea Muyurcó, Camotán, Chiquimula. Este suceso mantiene un clima de tensión entre los vecinos de esta región chortí, donde circulan boletines con los nombres de varias personas acusadas de robar niños.

Cuando los pobladores de Jocotán vieron a la mujer que no era del lugar en compañía de la niña, pensaron que la había secuestrado.

En ese momento se conformó una turba que no pudo consumar su intención debido a una llamada realizada a la subestación de la PNC de Jocotán. Los elementos se presentaron al lugar para rescatar a la mujer agredida.

Los agentes de la PNC trasladaron a la víctima y la menor a la subestación, donde se constató su parentesco.

Sin embargo, la turba no aceptó la explicación que les brindó la PNC y procedió a quemar la subestación, una radiopatrulla y una motocicleta, y bloquearon las entradas al lugar.

Debido a lo anterior, la PNC demandó el apoyo de 80 agentes de los municipios cercanos, así como de un escuadrón de las Fuerzas Especiales Policiales (FEP), que llegó desde la ciudad capital. Este grupo lanzó gases lacrimógenos para disolver la turba y evacuar la zona.

Alejandro Giammattei, candidato presidencial de la Gran Alianza Nacional, y su equipo, que realizaban un mitin en Camotán, debió esperar que se levantaran los bloqueos para abandonar el municipio.

Carlos Caljú, portavoz de la PNC: “La mujer y la niña no hablaban español, sólo chortí. Ella no pudo defenderse de los señalamientos”.

Intentan linchar a mujer en Jocotán

Por Gladys Ramírez y Orlando Reyes
Siglo 21 (18 jun 07)

Una turba enardecida de vecinos del municipio de Jocotán, en Chiquimula, intentó linchar a Dunia Marleny Guerra Aldana, a quien acusan de traficar con menores. Un reporte preliminar de nuestro corresponsal señala que los enfurecidos aldeanos quemaron una motocicleta y un autopatrulla de la Policía Nacional Civil (PNC).

Este hecho se da a dos días de que en Camotán, también en Chiquimula, lincharan a una mujer y vapulearan a otras dos, supuestas responsables de la muerte de la pequeña Alma Michelle España Díaz, de 8 años, a quien habrían secuestrado, para luego matarla y extraerle varios órganos del vientre, así como los ojos y el cuero cabelludo.

Al cierre de esta edición, Guerra había sido liberada por la Policía, pero los enfurecidos vecinos la emprendieron contra los vehículos y estación policial del lugar.

María López Marcos, quien también estuvo retenida porque con ella iba Brenda López López, de 8 años, de quien se temió estaba secuestrada, fue dejada libre por la turba luego de que el papá de la menor reconociera que no era un plagio porque María es tía de la niña.

Dos allanamientos

En Camotán, los residentes decidieron hacer justicia con sus manos, luego de detener a las tres mujeres.

Una de ellas, Ingrid Marisol Martínez, confesó haber recibido Q1 mil de Marciana y Jesús Interiano por entregarle a la niña. Responsabilizó a las hermanas de haber traficado los órganos, razón por la cual los vecinos las detuvieron, vapulearon e intentaron quemarlas. En el acto falleció Marciana.

La Comisaría de Chiquimula realizó dos allanamientos. Uno en la vivienda de Marciana. En el lugar encontró un maletín con el logotipo del Ministerio de Educación, el cual contenía ropa para bebé de ambos sexos. El otro lo hicieron en una cantina, donde no encontraron nada.

16 June 2007

Una mujer linchada y dos vapuleadas

Por Óscar F. Herrera
elPeriódico (16 jun 07)

El plagio de una niña de 9 años en la aldea Muyurcó, del municipio de Camotán, en Chiquimula, la tarde del jueves, motivó una búsqueda que se extendió hasta el mediodía de ayer, cuando su cuerpo fue hallado sin algunos órganos en un terreno baldío. Tras el hecho, una turba capturó a tres mujeres, supuestas responsables, y las vapuleó en el centro de la aldea, hasta provocarle la muerte a una de ellas.

El oficial de los Bomberos Voluntarios, Alex Archila, de la 39 compañía, con sede en Chiquimula, indicó que una mujer identificada como Jesús Recinos, de 32 años, fue trasladada por una unidad de la Policía Nacional Civil (PNC) con quemaduras de segundo grado al hospital de ese departamento. La víctima mencionó que en el hecho podrían estar involucrados varios médicos que supuestamente realizaron la extracción de órganos a la menor.

“Los vecinos no nos dejan entrar al lugar en donde tienen en su poder a una mujer, y al parecer hay una tercera que ya está muerta”, refirió el socorrista. Lo lejano de la aldea imposibilitó la comunicación, tanto con elementos de la Policía como de bomberos, indicó el jefe de servicio de la Comisaría 23 de Chiquimula.

“El tío de la menor puso la denuncia de su desaparición a las 17:30 horas, y de inmediato montamos un operativo de registro de vehículos, ya que sabíamos que fue plagiada en un automóvil, pero sin resultados”, dijo el agente de la PNC.

Se informó que la turba agredió a periodistas y que destruyeron los vidrios de una autopatrulla, cuando arrebataron a una de las mujeres de las manos de los agentes.

Con supuestos antecedentes

Se trata de tres mujeres que tenían antecedentes de dedicarse a convencer mujeres embarazadas para dar en adopción a sus hijos, pero que esta vez las vincularon directamente con el plagio, asesinato y desmembramación, por lo que la población decidió vapulearlas.

Al cierre de la edición, tanto los bomberos como la Policía daban cuenta que en el lugar aún permanecía en poder de la turba una mujer con vida.

Turba vapulea a tres mujeres

Por Edwin Paxtor y Wendy Ruano
Prensa Libre (16 jun 07)

Vecinos de Camotán, Chiquimula, capturaron y vapulearon ayer a tres mujeres sindicadas de haber asesinado a una niña y haberle extraído sus órganos. Una murió, otra fue quemada y la tercera está desaparecida.

La Policía Nacional Civil logró rescatar a una de las tres mujeres, a quien identificó como Jesusa Interiano Recinos, de 32 años, y la trasladaron al Hospital Modular de Chiquimula; otra murió, y de la otra se ignora el paradero.

La población las responsabiliza de la muerte de Alba Mishel España Díaz, de 9, quien fue secuestrada el jueves recién pasado.

La menor había salido a comprar a una tienda cercana a su casa, cuando desconocidos se la llevaron.

A las 14 horas de ayer, la niña fue localizada muerta y sin sus órganos.

Los habitantes de Camotán y Jocotán se unieron para buscar a la menor. Organizados y armados con palos y piedras, revisaron cada vehículo que pasaba por el lugar.

Vinicio España, padre de Mishel, quien se encuentra en Estados Unidos, suplicaba, vía telefónica, que “se hiciera todo lo posible para encontrar a su hija”.

Vecinos de la familia lamentaron el hecho, y exigieron a las autoridades la detención de la tercera mujer implicada en el crimen, quien se encuentra desaparecida.

Amenazan a periodista

Edwin Paxtor, corresponsal de este matutino en Chiquimula, fue amenazado por uno de los vecinos, quien lo despojó de su cámara fotográfica y de una parte de su equipo; además, fue amenazado de que, si no se retiraba del lugar, le pasaría “lo mismo que a las tres personas detenidas”.

Linchan a mujer por muerte de niña

Por Sandra Valdez y Orlando Reyes
Siglo 21 (16 jun 07)

Por el secuestro y asesinato de la niña Alba Michelle España Díaz, de 8 años, fue linchada una mujer y otras dos vapuleadas en el camino que conduce a la aldea El Brasilar, Camotán, Chiquimula.

Las señaladas por los pobladores como responsables del crimen son las hermanas Marciana y Jesús Interiano, así como Ingrid Marisol Martínez, quienes fueron vapuleadas y quemadas.

En el lugar citado murió Marciana Interiano, mientras que su hermana, quien resultó con graves quemaduras, y la otra mujer, fueron rescatadas por la Policía e ingresadas al Hospital Modular de Chiquimula.

Crimen atroz

La menor fue plagiada el jueves por la tarde, y desde ese momento los pobladores se organizaron para buscarla. El cadáver de la niña fue hallado ayer al mediodía. Los criminales le abrieron el estómago, le sacaron varios órganos, los ojos y cuero cabelludo, según las autoridades.

Martínez fue detenida por los pobladores, y obligada a confesar. Supuestamente recibió mil quetzales por entregar a la menor a las hermanas Interiano.